Yuyaychacuna

setiembre 24, 2006

Sin Manos, sin Pies, y ahora sin Convicciones


Los Veggie Tales es una entretenida y muy popular serie para niños basada en las aventuras de unas verduras parlantes animadas digitalmente. Bob el Tomate y Larry el Pepino son los protagonistas en mil aventuras de las que salen bien librados. La razón de su éxito radica en que ellos siempre están dispuestos a obedecer los principios de la Biblia y nunca dudan en reconocer fielmente a Dios en todas sus acciones.

Como soy un hombre “grande” que ha perdido mucho de la ingenuidad infantil, lo que a mí más me extraña de estos queridos personajes es que fueron diseñados sin brazos y sin piernas. Pero no crean que esto significa que ellos no puedan desarrollarse al 100% De una manera ú otra ellos se las arreglan para desafiar y vencer a los malos, manejar autos, pilotear aviones y navegar por los siete mares. Definitivamente para Phil Vischer, creador de estos personajes, lo más importante de sus vegetales animados no está en la fuerza de sus manos o la potencia de sus piernas (como en muchos otros héroes animados) sino en la claridad con que ellos presenten los principios cristianos como solución a sus dilemas.

Tal ha sido el éxito de estas verduras parlantes que hace poco la cadena de televisión norteamericana NBC empezó a poner al aire capítulos de 30 minutos cada sábado por la mañana. Lamentablemente la cadena televisiva creyó que Bob y Larry podrían ser aún más populares si es que también se les cerraba la boca. Los ejecutivos del canal decidieron editar unilateralmente las partes de la serie en donde los vegetales por ejemplo dicen: “Recuerden chicos, Dios los hizo a ustedes de manera muy especial, y Él los ama muchísimo”. NBC basa su decisión en que deben cumplir con un estricto código de transmisión que les impide manifestar algún tipo de adherencia religiosa. Sin embargo, ellos aseguran que este silenciamiento unilateral servirá para ampliar el número de oyentes que se beneficiarán con los mensajes positivos “sin religión” de Bob y Larry.

Phil Vischer ha afirmado que él no aceptará este tipo de censura ya que los Veggie tales son básicamente religiosos y que la trama de sus historias carece de significado si es que ellos pierden también sus principios fundamentales. De seguro correrá mucha tinta antes de que este problema se resuelva.

Hablar de nuestras convicciones religiosas en público se ha convertido en algo repudiable, carente de sensibilidad y hasta de mal gusto. Está claro que ser apabullados por la perorata incendiada e interminable de algún ‘iluminado’ religioso es realmente insoportable. Tampoco podemos negar que la historia humana se ha teñido, y lastimosamente se sigue tiñendo, con la sangre de hombres y mujeres que fueron sacrificados en aras de la ‘tradición’ o la ‘traición’ religiosa. Todavía estaría siendo injusto si no reconociera que muchas veces la agenda religiosa está a años luz de distancia de la realidad a la que ella dice adscribirse. Sí, todo esto es cierto, y los que nos consideramos religiosos debemos aprender con humildad de nuestros errores pasados y presentes. Sin embargo no podemos dejar que este unilateral silenciamiento social, que tiene aparentemente un propósito aséptico benigno, nos impida poder informar en libertad a nuestra comunidad acerca de nuestras creencias religiosas.

Pero no puedo tapar el sol con un dedo tratando de reclamar por una cura que puede ser peor que la misma enfermedad. Sólo en esta semana han sucedido tantas cosas relacionadas con opiniones religiosas que me veo obligado a pensar varias veces en lo que quiero decir. Por ejemplo Pat Robertson, el famoso tele-evangelista norteamericano, llegó a afirmar que Ariel Sharon puede estar en coma producto de un castigo divino al tratar de dividir la tierra prometida. Esta afirmación ha causado tensiones diplomáticas y aclaraciones de todo tipo de parte del gobierno. También están las declaraciones del Papa acerca del Islam que han provocado iras santas en todo el mundo islámico pidiendo desde su renuncia hasta su aniquilamiento. Bastan este par de sucesos para pensar con cautela y hasta con escepticismo en nuestra capacidad para hacer las cosas con equilibrio. En ambos casos las dos personas aludidas presentaron casi una inmediata disculpa, pero ya el mal estaba hecho y los dichos entregados en nombre de la religión han sido motivo para irritar a unos, causar risas en otros y tristeza en muchos más.

La primera vez que Pedro y Juan fueron encarcelados, Pedro no tuvo reparo en afirmar delante de aquellos que le pedían silenciar sus creencias: “nosotros no podemos dejar de hablar de lo que hemos visto y oído” (Hch.4.20). Yo creo que la pasión espiritual de Pedro por compartir su fe es intrínseca a ella misma y por lo tanto acompaña a todos los que tienen alguna convicción religiosa. Pero esa pasión no se puede convertir en un avasallamiento irrespetuoso y menos en una justificación divina para hacer daño a otros seres humanos. En los evangelios está clarísimo el ejemplo de Jesús quien siempre supo dialogar en igualdad de condiciones y con muchísimo respeto con todos aquellos que se le pusieron delante. ¿No nos hemos dado cuenta acaso que muchas de las mejores enseñanzas de Jesús fueron originadas por las extraviadas y muchas veces malintencionadas preguntas de aquellos que simplemente querían verlo caer? ¿Hubiéramos podido nosotros hablar con Nicodemo con la prodigalidad con la que lo hizo Jesús? ¿Hubiéramos tenido la misma paciencia y amor que Jesús tuvo con la mujer samaritana? ¿Comeríamos tranquilamente en la casa de Zaqueo y dejaríamos ir silenciosa y respetuosamente al joven rico? Jesús no sólo nos enseñó principios eternos que debíamos respetar y amar, sino que también nos dio el ejemplo para saber cómo compartirlos en respeto y amor. Por eso no sólo nos enseño que debemos amar a Dios por sobre todas las cosas, sino que también debemos amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos.

Quisiera sugerir entonces una manera sabia que puede garantizar el que seamos oídos. En alguna oportunidad la Madre Teresa de Calcuta estaba preocupada por la tendencia de las hermanas a su cargo de “sermonear” a las personas que atendían. Ella les dijo que no había nada de malo en querer compartir el evangelio con los necesitados, pero ella les sugería una formula para hacerlo con sabiduría. La Madre Teresa les dijo que la próxima vez que vayan a la casa de un necesitado y sientan la imperiosa necesidad de predicar, que primero tomen una escoba y limpien completamente la casa, laven las ropas sucias y preparen una buena comida. Después de haber servido con humildad y dedicación, y si es que todavía hay algo que decir, las palabras podrán ser más precisas y mucho más llenas de amor. Yo creo que lo que la Madre Teresa estaba tratando de enseñar es que si nos atrevemos a volver a servir, entonces es muy probable que nos vuelvan a oír.

Pepe Mendoza

3 Comments:

  • Estimado Pepe:

    Descubrí esta página donde escribes y quisiera preguntarte si es la misma intención tuya que de los Devos ¿Aún está disponible? ¿Qué pasó con Puntos de Vista?

    Espero tus respuestas

    PD. ¿Te dije mi nombre? Me llamo: David Eduardo Ganoza Zelada (de la Alianza de Pueblo Libre)

    By Anonymous Anónimo, at 11:00 p. m.  

  • Hola Pepe,

    As you know I am not good with Spanich so I'll have to write in English. Steve and Amy and I have somehow lost contact with you all. We miss you all terribly and are sorry to hear of Adriana's health troubles. We are praying for her and for you all. I wish we could come for a visit. We have moved and live in White Rock area but also part of Surrey. Our new phone number is (604) 538-5483. I get sad and cry when I think of you guys - soo homesick for our good friends. Give Adry a hug from us and love to you guys.
    Lori,and Steva, and Amy too

    By Blogger LolaandStan, at 10:44 p. m.  

  • Hola Pepe:
    Hace mucho que no sabía de tí, leo algo sobre tu persona en la red.
    Dime, ¿sabes sobre material y estrategias de evangelización para profesionales y empresarios?.

    Espero que Ericka también se encuentre bien.

    Dios los guarde.

    Miguel Linares Saavedra
    (De la Jac de la seguna mitad de los 80´s amigo de Cesár Girón, Dante Carbajal, Ricardo Cabezas)
    Mi email es mikcbv@hotmail.com

    By Anonymous Anónimo, at 11:35 p. m.  

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